La empresa Mercadona, una de las principales cadenas de supermercados en España, se ha visto envuelta en un lío. La polémica saltó hace tan solo unas semanas cuando la empresa Incarlopsa, fabricante de carne de cerdo, y conocido en los medios como «el carnicero de Mercadona», fue acusada de maltrato animal en su matadero de Tarancón (Cuenca).
«Los cerdos acudían conscientes al proceso de degüello»
El supuesto maltrato animal se produciría en el proceso de sacrificar a los cerdos, ya que estos no serían correctamente sedados. El maltrato se produce al no cumplir la normativa de bienestar animal por no sedar correctamente a los cerdos antes de ser sacrificados.
Para poder sacrificar a los cerdos según la normativa, estos debes ser expuestos durante 3 minutos en un pozo de CO2 para que pierdan el conocimiento y queden totalmente sedados. El ritmo de producción hace que esto no se cumpla siempre y que se reduzca el tiempo de exposición.
«Los cerdos asisten al proceso de degüello y desangrado conscientes«
Según los procesos de la empresa, aquellos cerdos que no estaban del todo anestesiados, se les aturdía con una descarga eléctrica, y había jornadas en la que todos los cerdos necesitaban ser aturdidos con estas descargas.
Tras saltar el escándalo hace unas semanas, la empresa rompió el silencio emitiendo un comunicado asegurando que tenían el certidicado Welfare Quality, un protocolo europeo de evaluación de bienestar animal para granjas y mataderos que permite acreditar los estándares más altos de bienestar, por encima de los requisitos que establece la ley.
La empresa ha tenido que quitar el certificado de su página web
El Institute of Agrifood Rerearch and Technology de Catalunya (IRTA) y la Sociedad Española de Normalización y Certificación (Aenor), encargadas de las evaluaciones Welfare Quality’en España, han informado prudentemente que Incarlopsa no cuenta con esta certificación.
«Los únicos que hacemos las evaluaciones y damos los certificados Welfare Quality en España somos nosotros. Es un protocolo que está abierto en internet y que cualquiera puede consultar y aplicar, pero es necesaria una supervisión oficial», estas son las declaraciones de Antoni Dalmau, veterinario e investigador experto en bienestar animal responsable de las certificaciones.
Incarlopsa no dispone de dicho certificado y sus métodos siguen en entre dicho, mientras tanto, Mercadona se mantiene al margen del conflicto.
