Los millenials son jóvenes que siempre nos sorprenden con algo nuevo. Su forma de pensar, su conocimiento de la tecnología o el gran tiempo que tardan en madurar son algunos ejemplos.
Sin embargo, esta vez se han superado. Puestos a hacer locuras por amor, le han dado una vuelta al concepto de piercing y han decidido utilizarlo como un sustituto al clásico anillo de pedida.
La nueva moda para pedir matrimonio en Instagram
La nueva generación ha dejado a un lado las alianzas y ha optado por declarar su amor de una forma aún más duradera: realizándose un piercing en el dedo anular. Esto podría ser la solución para todas esas personas que temen perder su futuro anillo de compromiso. Este ni se cae ni se pierde.
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Esta idea tan loca cada vez tiene más seguidores y los que la llevan a cabo publican todas sus fotos a través de la red social Instagram. Hay quienes optan por atravesarse literalmente el dedo y colocarse un diamante en el centro y quienes se perforan de forma doble, colocándose un piercing como los del ombligo.
Aunque cuesta mucho menos que comprar un anillo de diamantes, el dolor que produce es muy fuerte ya que los dedos tienen muchas terminaciones nerviosas que otras partes del cuerpo, es muy sensible y está lleno de microorganismos.
Por ello, además de cicatrizar más lentamente y con mayor dificultad, el dolor es más intenso. Es bueno aclarar esto ya que hay mucha gente que hace preguntas sobre si esta nueva moda duele mucho.
Lo que no sabe la gente es que hacerse un piercing puede conllevar complicaciones como infecciones, alergias o inflamación. Antes de hacerlo, párate a pensar en las consecuencias y, si te decides, ponte en manos de un buen profesional y sigue todos sus consejos.