Las redes sociales hacen que cualquier establecimiento, por pequeño que este sea, se convierta en el ojo del huracán si toman una decisión con la que no comulga todo el mundo. Esto es lo que le ha pasado a un pequeño bar de Salamanca que se ha convertido en el centro de la polémica a raíz de una «normativa» para sus clientes.
«Gracias a vosotros y vuestros comentarios nos hemos dado cuenta que nos hemos equivocado«
Los dueños del local, dado el aluvión de criticas que han recibido, se han visto en la obligación de retirar el documento.
La normativa en cuestión recoge unas pautas que deben tener los menores y sus acompañantes adultos en el interior del establecimiento.
Normativa sobre menores del Bar Livingstone en Salamanca. El adultocentrismo se extiende peligrosamente en un país en el que cada vez hay menos niños… y en el que también cada vez hay más gilipollas. pic.twitter.com/OjbJqyRTkd
— A. Sánchez Moreno (@alejandrosanmo) March 6, 2018
- Los menores permanecerán en todo momento con sus padres, sin separarse de ellos.
- Está prohibido entrar con cualquier tipo de juguete en el local, (excepto móviles y consolas)
- Si el menor llorase, gritase o hiciera ruidos molestos para el resto, los padres, deberán sacar al menor hasta que deje de hacerlo.
- Está prohibido cambiar a los niños en el local fuera del aseo
- Está prohibido que los menores realicen juegos dentro del local y se desplazarán dentro del mismo andando y sin correr.
Esta hoja de normas se ha vuelto viral en cuestión de horas y aunque el establecimiento ya las ha retirado, la polémica está servida, dos bandos se han formado y ninguno quiere dar su brazo a torcer.
Yo no entraria en ese local con o sin niños….POR PRINCIPIOS
— Luis Javier Gonzalez (@LuisJaRuiz13) March 6, 2018
Los menores son un por culo, sobre todo cuando sus padres no han sabido darle una educación para que se comporten en sitios públicos.
— Er Tiburón (@Tiburonaco) March 6, 2018
Los hay que consideran que la petición del bar es más que razonable y que querer comer en tranquilidad y sin niños que «molesten» no es algo malo, y por otro lado están los que consideran que los dueños del bar están siendo totalmente intransigentes y que se les ha olvidado que ellos también fueron niños.