En la actualidad hay mucha gente sin trabajo y, por ello, muchos aceptan puestos precarios con muy poco sueldo y en malas condiciones. Con esto consiguen sobrevivir mientras otros se aprovechan de la mala situación económica de estas personas en las que se engloban familias, jóvenes e incluso jubilados.
Sin embargo, hay gente que ha aprendido a vivir a costa de otros. Utilizan la estafa para aprovecharse de esas personas que caen en algunas ofertas de trabajo que son muy accesibles. Por ejemplo, si te llega una oferta de que en el Primark de Gran Vía, el más conocido de España, necesitan nuevos dependientes, te lo creerías, ¿verdad? No es un anuncio extraño y por lo tanto consigue captar la atención de mucha gente.
Muchos jóvenes vieron la oportunidad de trabajar en la tienda. Según La Razón, se había publicado una oferta de empleo de este establecimiento mediante una aplicación llamada Cornet Job, que se utiliza para buscar trabajo.
Cuando enviabas la solicitud, recibías una respuesta casi inmediata diciéndote que habías sido «preseleccionado» y te facilitaban un número de móvil para que contactases con ellos y realizases todo el proceso a través de Whatsapp.
Ramón, un chico de 20 años, cuenta que le habían citado en la segunda planta de la tienda para realizar una entrevista, cosa un poco extraña ya que se suelen realizar en el último piso, con un vigilante en la puerta. Este joven se pensaba que era una oferta lanzada por la sección de Recursos Humanos de la empresa. Sin embargo, detrás de todo había un grupo de estafadores.
Si querías ser entrevistado, debías pagar previamente diez euros a través de la plataforma «paysafecard» y acudir a la entrevista con el DNI y el resguardo del pago. Los estafadores te decían que el dinero te sería devuelto cuando acabase el proceso de selección.
El pago se podía realizar a través de gasolineras y locutorios y debías enviar el resguardo por Whatsapp. Así conseguían averiguar cuántas personas habían caído en la trampa. La cantidad no era elevada así que muchas personas accedían. Los estafadores actúan tan rápido que no permiten a la víctima investigar si se trata de algo fraudulento.
Como a este Primark va tanta gente, a nadie le pareció extraño ver un grupo de personas con un ticket y el DNI en la mano. Como no les atendía nadie, preguntaron al personal, que le advirtió de que se trataba de una estafa. Además les dijeron que denunciasen lo ocurrido. Primark también denunció los hechos. Aún no se conoce el autor del engaño y aún siguen investigando el delito.
