Rafael Nada nos demostró ayer que ha pasado a los libros de historia del deporte español no sólo por la cantidad de títulos y récords que ha batido, sino también por su personalidad y forma de ser. Tras perder la gran final de Australia, no dejó un discurso que se ha ganado a todos.
Rafa Nadal se gana los aplausos de todos
Nadal se enfrentó a Novak Djokovic el pasado domingo en la final del Gran Slam de Australia y no pudo llevarse el primer premio tras perder, por bastante diferencia contra su rival.
Sin embargo, Nadal nos volvió a demostrar que él era su mayor crítico y que sabe reconocer los errores cuando le dieron el trofeo que le acreditaba como segundo clasificado: «No ha sido mi mejor día, por supuesto».
No se quedó ahí, el tenista ha querido explicar su situación, ya que acababa de volver de una lesión y aprovechó para darnos a todos una valiosa lección:
“ A Nadal, la victoria le glorifica y la derrota le humaniza. Da gusto verle caer. Su discurso es de una simpleza que tumba: el rival ha sido mejor y el varapalo le sirve para levantarse y volver a intentarlo. Luego recoge sus cosas, da las gracias y se va por donde ha venido”
Enlace patrocinado— Anton Baldomir (@antonbv10) January 28, 2019
«Hoy no ha sido mi mejor día pero han sido dos semanas muy buenas. El año pasado pasé por un tiempo complicado y no pude jugar ningún partido profesional desde que me lesioné en el Abierto de EE.UU hasta la primera ronda aquí. De verdad creo que esto puede ser una buena inspiración para lo que está por venir»
«Solo puedo decir una cosa: Voy a seguir peleando duro, seguiré entrenando duro para ser mejor jugador«.
(VÍDEO) El inspirador discurso que demuestra el espíritu de superación de Rafa Nadal. Rafa demuestra una vez más que es el mejor, incluso en la derrota ?? https://t.co/Z7Y9d83cXC pic.twitter.com/3ME6QkIuXy
— Carrusel Deportivo (@carrusel) January 27, 2019
Nadal no se va a rendir, va a luchar por ser el mejor y tú también deberías hacerlo en tu día a día. Sin importar a qué te dediques. Los esfuerzos tienen recompensas.
No se olvidó, además, de dar la enhorabuena a su rival. Gracias Nadal, por todo.
