
Tras haberse convertido en una de las estrellas del festival de cine de Venecia, ha salido a la luz la cara más desconocida de Georgina Rodríguez, la novia de Cristiano Ronaldo. Y es que, según aseguraron ayer en Sálvame diario, no ha querido saber nada de su familia desde que empezara su relación con el futbolista.
La pésima situación de la abuela de la novia de Cristiano Ronaldo
«Su abuela Juana vive con dos hijos en una casa prefabricada después del terremoto en Lorca del año 2011. Lleva ahí siete años viviendo», desvelaba uno de los reporteros del programa.
Se trata de una familia humilde y trabajadora. La mujer, de 82 años, está enferma y tiene una deuda de más de 3.000 euros como consecuencia de mala gestión de sus hijos, por lo que ha tenido que malvender su casa. Y según aseguran fuentes cercanas, se puso en contacto con su nieta antes de venderla para pedirle dinero, pero Georgina no contestó.
«Se sienten abandonados. Para Georgina su abuela era una segunda madre», han explicado en el programa. Pero según parece, no son los únicos miembros de su familia que tienen quejas sobre el comportamiento de la joven. El padre de Georgina está ingresado en Buenos Aires, y su hija todavía no ha ido a visitarle. Según explicó uno de los reporteros, no se ha interesado por su estado de salud y solo mantiene relación con su madre.
No solo sus familiares tienen algo que decir en el asunto. Algunos vecinos de Lorca se han proclamado y han contado que «no llama a la familia y ni siquiera les ha enseñado al niño». Eso sí, han asegurado que tras haberlos «abandonado» ya no quieren saber nada más de ella.