Jason Momoa ha terminado de entrar por la puerta grande de Hollywood, el que ya fuera famoso por su gran interpretación de Khal Drogo en Juego de Tronos, se ha ganado el cariño del público gracias a su interpretación de Aquaman.
Una de las cosas que más ha llamado la atención entre la gente es su ruda apariencia y el gran tamaño que tiene, aunque no siempre ha sido así como nos muestran las siguientes imágenes.
¿Te imaginabas a Jason Momoa así de joven?
El actor saltó a la fama gracias a la serie de HBO, aunque antes ya se había ganado a cierta parte del público con su interpretación en una serie mítica de los 90 como eran Los Vigilantes de la Playa en el papel de Jason Loane.
Lo más increíble de esta época es ver lo cambiado que estaba el actor que ahora está cerca de cumplir los 40 años.
Lejos quedaba en aquellos años el pelo largo y la barba, y aunque se le veía en buena forma, ni de cerca se parecía a lo que acabaron siendo sus músculos. Lo único que se conserva son ciertos rasgos de su cara, sobretodo los ojos, aunque todavía no se puede apreciar la característica cicatriz que tiene en una de sus cejas.
El actor, procedente de Hawai, dijo en una entrevista que su cicatriz se la hizo en una pelea de bar, donde le pusieron bastantes puntos, desde entonces se controla mucho más que antes.
Lo que está bastante claro es que, hay actores que saben conservarse muy bien, puede que te guste más el Jason Momoa actual o el de hace casi 20 años, pero lo que está claro es que hay quienes saben mantenerse bien.
