La segunda semana de la nueva temporada de El Hormiguero ha comenzado con la visita de Miguel Ángel Revilla, presidente de la comunidad autónoma de Cantabria, el cual se ha mostrado como siempre, hablando claro y sin tapujos.
Empezó el programa entregándole a Pablo Motos y al equipo algunos regalos entre los que había panes de todo tipo, un sobao de arándanos, anchoas del Cantábrico y una taza de un grupo de motoristas de Murcia.
La actitud de Miguel Ángel no fue la esperada
El presentador intentó comenzar la entrevista, pero la actitud de Miguel Ángel Revilla lo dejó sin palabras.
«¿Has traído temas preparados? Porque yo tengo aquí un guión,» comenzó el presentador, a lo que Revilla contestó: «A mí me gustaría tratar un tema que es mi debilidad, que son esos temas sociales de África, que me dará pie para desarrollar una teoría frente a todo lo que se está vendiendo ahora para solucionar el tema de la inmigración, para lo que necesitaría 15 minutos».
Esta respuesta sorprendió mucho a Pablo Motos, que intentó reconducir la entrevista, contándole los puntos que tenía su guión.
«Al final vamos a hacer lo que te de la gana, pero mi me gustaría hablar de Pedro Sánchez; de si va a haber elecciones; de los independentistas; de Soraya Sáenz de Santamaría, que ha anunciado hoy que deja la política; de Pablo Casado…,» decía Pablo Motos intentando convencer al político.
Sin embargo, viendo que no obtenía resultados y que Revilla solo negaba con la cabeza, decidió irse a publicidad para intentar reconducir la situación tras las cámaras.
«Venga, vamos a dar paso a la publicidad porque no me hace caso,» decía Pablo tras no poder llevarse a Revilla a su terreno.
Tras la publicidad, consiguió reconducir el programa y habló con Revilla de muchos temas actuales, dejándole unos minutos para que el político pudiese hablar del tema que mencionó al principio.
