Marcela y Elisa se convirtieron en 1901 en la primera pareja de mujeres en estar casada de forma legal en España. Pero su historia no fue precisamente bonito, y esto es todo lo que les ocurrió cuando fueron descubiertas.
La historia del primer matrimonio homosexual en España
Elisa Sánchez Loriga y Marcela Gracia Ibeas se enamoraron siendo adolescentes, a finales del siglo XIX, en A Coruña. Ni sus familias ni la sociedad aprobaba su relación, por lo que vivieron separadas hasta que coincidieron trabajaron como maestras en dos aldeas cercanas de la provincia. Fue entonces, cuando decidieron casarse, y para burlar la ley, una de ellas se hizo pasar por un hombre, con el nombre de Mario Sánchez.
Consiguieron contraer matrimonio por la iglesia, el 8 de junio de 1901. Y todo esto se llevó a cabo más de 100 años antes de que el matrimonio homosexual fuera legal en España, por lo que su historia puede considerarse todo un precedente en nuestro país.
Sin embargo, y a pesar de la boda, su historia no fue un camino de rosas. Sus familias las repudiaron y sus vecinos se enteraron de su secreto.
Como consecuencia de ello, ambas perdieron su trabajo, fueron excomulgadas y se dictó una orden de busca y captura, por lo que tuvieron que terminar exiliándose a Portugal, tratando de huir de los rumores y las repercusiones legales. Por supuesto, el matrimonio homosexual no era legal en la época, pero además el travestismo también era delito; y por supuesto, la falsedad documental.
La huida parece que tampoco fue nada fácil, en Oporto fueron encarceladas, juzgadas y posteriormente liberadas. Lo último que se supo de ellas, es que llegaron a subirse a un barco con destino a América, posiblemente a Argentina, como tantos otros gallegos en esa época, donde finalmente se quedaron a vivir.
Pero no siquiera allí pudieron vivir tranquilas. Una vez allí, tuvieron que recurrir a nuevas estrategias para superar las circunstancias que imponían la separación. Elisa incluso tuvo que casarse con Christian Jensen, un hombre 24 años mayor que ella, para poder acceder a un hogar; al que más tarde llevaría a Marcela (bajo la identidad de Carmen), como si fuese su hermana, y a su hija.
Ahora, la última ganadora del Goya a mejor dirección, prepara llevar al cine a esta historia, que se comenzará a rodar el próximo mes de mayo. Según se comenta, las protagonistas podrían ser María Valverde y Natalia de Molina.
