Aunque parezca que lo único que les sorprende y les encanta a los extranjeros son la paella, el jamón, la sangría o el flamenco, España tiene muchas más cosas que aunque a nosotros nos resultan de lo más normales, a quiénes nos visitan les enamoran por completo. Nuestra forma de vida y de ver el mundo es conocida en el mundo entero…
Las 10 cosas que más les gustan a los extranjeros de España
1- La siesta
Por desgracia, la mayoría de las personas no pueden disfrutar de esta costumbre todos los días. Pero nadie nos perdona disfrutar de este lujo los fines de semana o en los días libres. Y ni hablar en los calurosos días de verano. ¡No hay nada mejor!
2- La sobremesa
No solo la costumbre es solo nuestra, también la palabra. Solo aquí somos capaces de unir la comida con la cena. Y es que en buena compañía y con una conversación interesante, las horas pasan volando…
3- Los mercados
Aunque no seamos conscientes de ello, tenemos una variedad de productos frescos, producidos en nuestro país, envidiable. Y lo mejor de todo, es que los podemos encontrar en cualquier barrio: vinos, quesos, verduras, jamón, aceite de oliva,…
4- Los menús
Estamos tan acostumbrados a ellos que nos parece que existen en todos lados. Sin embargo, comer estupendamente a un precio fijo no es fácil en muchos lugares del mundo. Primer y segundo plato, postre, pan y café, un lujo que no apreciamos.
5- Las tardes «infinitas»
Hay países donde las tardes, especialmente en invierno, prácticamente no existen. Sin embargo, en nuestro país en las jornadas estivales pueden llegar a ser verdaderamente largas…
6- Las salidas nocturnas
Salir por la noche a tomarse una copa en nuestro país no solo es muchísimo más barato que en la mayoría de países, sino que además la seguridad de nuestras calles nos permiten movernos con tranquilidad.
7- El sentido del humor
Nuestro sentido del humor es sin duda una de las cosas más conocidas de nuestro país. Y es que nos permite conectar con los demás y define nuestra cultura. Los chistes, la ironía o las frases cotidianas llaman mucho la atención de quienes nos visitan.
8- La vida en la calle
Una cosa tan simple como esta es un auténtico privilegio. Sentarse en una terraza al sol, llevar a los niños a jugar al parque, pasear sin rumbo fijo o dar una vuelta por las tiendas de la ciudad son planes menos asequibles en otros países. Nuestro clima permite que las calles estén llenas, incluso de madrugada en verano.
9- Las tapas
Sí, sin duda es una de las cosas más típicas, pero es que ¿quién puede resistirse a la tortilla de patatas, el «pescaito frito» o los pintxos? Por no hablar de las aceitunas. Aunque estemos acostumbrados a ellas, es un bien que debemos apreciar.
10- El sol
Aunque en las zonas más septentrionales no pueden disfrutar tanto de él, quienes lo tienen a diario no lo valoran como se merece. No ver el cielo azul durante meses es algo a lo que no estamos acostumbrados en nuestro país, y algo con lo que sueñan quienes habitan lugares más fríos.
